16 septiembre, 2021
Todos aquellos que pasan muchas horas sentados en una mesa de trabajo. Son los más afectados por la falta de una silla en buen estado. Ubiquémonos en una oficina, un salón de clases, una sala de cine, en nuestro hogar. Donde estemos sentados por un largo periodo de tiempo.
Donde más se destaca la importancia de contar con mobiliario en buen estado es en lo concerniente al área laboral. Cuando estamos pensando en el crecimiento de nuestra empresa debemos pensar en la salud y bienestar de nuestros colaboradores. La adquisición de sillas en buen estado no se debe de tomar como un gasto sino más bien como una inversión.
Es por ello que no se debe escatimar al momento de hacerlo. Pasan las horas laborales y los usuarios van quedando atrapados por el estrés y las malas posturas lo cual afecta en el tiempo el rendimiento. El contar con sillas en buen estado nos permite resolver un problema grave tácito pero invisible como es el de los trastornos de salud.
La ergonomía es la ciencia tutora que aplica conocimientos científicos en lo concerniente al entorno humano, teniendo gran incidencia en su bienestar corporal aplicando determinadas recomendaciones.
Es por ello que la productividad laboral se incrementa al momento de seleccionar una silla en buen estado brindando comodidad y el confort que se requiere para soportar tantas horas continuas.
La silla debe permitir sentarse de manera recta y que ayude a mantener una óptima postura corporal, esto es indispensable para evitar lesiones y fatiga. Dotar a nuestros aliados de una silla en buen estado mejora su salud a largo plazo y se evitan enfermedades.
Existen muchas consecuencias graves que pueden surgir al no usar una silla en mal estado. No obstante, mencionaremos las más relevantes.
Término utilizado en el área de salud al referirse a malestares en músculos, articulaciones, tendones, ligamentos, huesos y nervios de las zonas afectadas. Tales como espalda, cuello, hombros, manos (túnel carpiano).
Ocasionados por estar mucho tiempo en una misma posición, realizando movimientos repetitivos, optando por posturas poco usuales, vibraciones en el piso. Deben ser contrarrestados por un mobiliario que permitirá contrarrestar incidencias en la salud del colaborador.
De más está decir cuánto incide ante nuestros ojos una silla deteriorada, maltrecha, sucia, vencida. La vida útil de una silla en buen estado es directamente proporcional al buen uso y cuidado que se le brinde.